(Entrevista al senador nacional Ramón Mestre, publicada en la edición Nº29)
El senador radical se muestra crítico con el federalismo del oficialismo y reclama una mayor redistribución de fondos.
El senador de la UCR por Córdoba, Ramón Mestre, ganó la interna para disputar la intendencia de la capital de su provincia y se posicionó como uno de los referentes partidarios para la renovación. En diálogo con el estadista cuestionó la relación del Gobierno con las provincias y consideró que una victoria en su distrito local será una “demostración contundente” de la capacidad de gobierno de la UCR.
-¿Cómo ve el escenario legislativo para este año?
Después del fracaso legislativo que tuvimos en 2010 es hora de recuperar rápidamente el tiempo perdido y darle impulso a los proyectos que necesita la Argentina para lograr un desarrollo más equilibrado como país.
-¿Qué proyectos considera clave en esa línea?
Creo que se impone una regionalización, una discusión clara y madura para que vuelvan los recursos a las provincias y los municipios puestos que son los que los generan y así poder llevar adelante la gestión.El kirchnerismo ha significado un claro retroceso en la condición de las provincias, y eso no lo digo yo, lo dicen los números. Evidentemente, la transferencia de recursos hacia las provincias es aún escasa y
no se ha cumplido lo que se prometió. Nosotros hemos presentado proyectos e incluso hay una ley para asegurar un piso a las provincias, que el Gobierno Nacional no ha cumplido
-¿Y desde el punto de vista institucional?
Hay un montón de proyectos, pero creo que las fuerzas opositoras deberían concentrarse en hacer algo con el sistema estadístico, será algo clave. Cualquier cosa que se quiera medir está mal, y no se puede avanzar en otras áreas sin información precisa y confiable.
-Usted fue proclamado hace pocos días atrás candidato a intendente de Córdoba, ¿qué lo impulsó a presentarse?
Yo nací, estudié y trabajé allí, y quiero trabajar ahora para una ciudad que sea más próspera. Necesitamos un plan para pensar a Córdoba con un plan de desarrollo de ahora a 20 años, que los cordobeses recuperen el orgullo de vivir acá, tras 12 años de abandono total en los que estuvo. Hay grandes déficit organizativos e institucionales. A esta ciudad le hace falta ponerle orden al desorden y también establecer prioridades que signifiquen volver a prestar servicios y llevar adelante la obra pública.
-¿Cuáles cree que deben ser las fortalezas de la campaña para que la UCR vuelva a gobernar la capital provincial?
Nuestra primera fortaleza es no mentirles a los ciudadanos. No imitar al kirchnerismo que plantea un discurso de centroizquierda y luego termina con los mismos que fueron menemistas, duhaldistas y ahora kirchneristas, que tienen mucha facilidad para pasarse de un bando a otro. Esto no le hace bien a la sociedad y termina siendo una debilidad. Nuestra misión es no defraudar a la provincia, y para eso tenemos un programa de gobierno.
-A nivel provincial, ¿piensa que debería haber alianzas con otros partidos? ¿Con cuáles ?
Las alianzas no son ni buenas ni malas por sí mismas. Deben estar planteadas con gente que comparta algunos ejes básicos como el respeto a la Constitución y el sistema federal. Pero nosotros, más allá de los nombres, estamos convencidos de que lo importante es definir una cruzada contra la pobreza que hoy se extiende por el país, y lanzar, por ejemplo, un plan de viviendas sociales. Más que ganar o perder una elección juntado con éste o aquél, lo importante son las ideas que tratamos de impulsar y cómo le resolvemos los problemas a la gente. Nuestro proyecto está en marcha para liderar el reclamo de federalización y más allá de los nombres urge hablar de las ideas en común.
-¿Y a nivel nacional?
Estamos en un proceso de selección de nuestro candidato con algunos tironeos, pero los dirigentes nacionales deben concentrarse en plantear el debate sobre los temas que necesita la Argentina. La elección del candidato tiene que resolverse de una manera madura, y las internas del 14 de agosto son una buena forma de hacerlo.
-Córdoba vota varios meses antes de las elecciones presidenciales, ¿esperan darle la primera gran derrota al Gobierno?
Lo más importante hoy, más allá de los resultados, será definir un plan social claro para que todos los sectores sociales se sientan comprometidos. Y si trabajamos en eso quedará a un lado la cuestión de ganar o perder. Más que una derrota al oficialismo, nuestra intención es que el 7 de agosto haya una demostración contundente de que podemos ser gobierno y trabajar para erradicar la pobreza.
-Todos los partidos parecen estar pasando procesos de recambio. Hace dos semanas Juan Manuel Urtubey se impuso en Salta, ¿siente algo en común con el resto de los dirigentes sub-45?
Yo tengo un gran respeto por Urtubey. Creo que es de los pocos dirigentes del oficialismo que intentan plantear los temas con debate y profundidad sobre la base de propuestas e ideas. Y ese ha sido el mayor déficit de nuestra democracia en los últimos años. Quizás sea esta generación la que intente construir política teniendo eso en cuenta.
