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“El elector es sofisticado y está varios pasos más adelante que la dirigencia y el periodismo”

18 noviembre de 2013

Entrevista a Carla Carrizo, diputada nacional electa por la Ciudad de Buenos Aires

El primer desafío de Unen fue generar un espacio democrático de participación para todos los sectores no peronistas ni macristas. En rigor, hacer uso de las primarias. El segundo desafío fue encolumnarse detrás de los ganadores, algo que, con matices, se logró. ¿Cuál es el desafío ahora?

Yo arrancaría preguntando porqué Unen tuvo y tiene esa especie de encanto que hoy lleva a muchos a pensar y reclamar su nacionalización. Para mí eso tiene dos motivos. Primero, porque se hicieron primarias ambiciosas; se amplió al máximo el espectro de representación, desde la centroderecha de Lilita Carrió hasta la centroizquierda radical o del FAP; se ordenó la competencia partidaria porteña y se unificó la oferta electoral a través de un mecanismo claro.En definitiva, usamos todo el potencial de las primarias. El segundo factor de encanto es que Unen demostró que la oposición, en muy poco tiempo y con inteligencia estratégica, podía ganarle al oficialismo nacional y al de la CABA.

¿Cuáles son los próximos pasos?

Hay que seguir expandiendo el poder electoral, sobre todo en los dos distritos en los cuales la oposición no peronista está más débil: la CABA y la provincia de Buenos Aires. Hay que expandir la marca Unen. Para eso es necesario consolidar el poder legislativo a través de un interbloque o un grupo parlamentario; ese es el desafío de corto plazo. Por supuesto, siempre hay temores y sospechas en torno a la sustentabilidad de las coaliciones y muchos traen y traerán a colación la experiencia de la Alianza. Sin embargo, yo creo que son experiencias distintas y el electorado, que siempre está varios pasos más adelante que la dirigencia política, lo sabe y reconoce a Unen como una experiencia colectiva genuina. El electorado, que es cada vez más sofisticado, confía más en Unen que en el periodismo político. Está dispuesto a arriesgar si la oferta se muestra solvente y le da confianza. No parece una tarea fácil.

¿Cómo se muestra eso?

Hay que crear poder institucional, es decir, resolver la unidad en el Congreso y poder sectorial, con eje en la vinculación con actores de la sociedad. En el Congreso debemos actuar de manera homogénea en lo referido a políticas de Estado y de manera diferenciada en los temas que tengan que ver con las agendas políticas provinciales.

¿Qué es el poder sectorial?

El poder sectorial es un gran desafío y, como radical, creo que debemos cambiar nuestra mirada porque ha sido un déficit histórico. Esto es clave, no para ganar elecciones, sino para ser sustentables en el poder. Hablamos de política económica, pero no tenemos vinculación con los empresarios. Hablamos de política cultural, pero no tenemos vinculación con los artistas. Lo mismo pasa con la política social y tantos temas más. Hay que rescatar el radicalismo histórico, y me refiero al de 1890-1930. En ese entonces, lo primero que hizo el radicalismo fue crear poder social y sectorial, con la Iglesia, las Fuerzas Armadas y otros actores. Y eso fue clave para ser sustentable y ganar tres elecciones consecutivas. Ahora Unen debe pasar a construir estos dos poderes, que son clave para ser competitivos electoralmente y gestionar. Si no sólo seremos un partido normativista, es decir, hablaremos de política pero no tendremos actores.

¿En qué provincias se enfocarán para exportar el modelo Unen?

En los distritos grandes, centralmente. Mendoza, Córdoba, la Ciudad y, desde ya, la provincia de Buenos Aires. Si logramos consolidarnos en esos distritos, tenemos una buena estrategia societal y usamos el Congreso para hacer política nacional y no sólo leyes, podemos llegar a ser competitivos en 2015.

¿Cómo evalúa el desempeño del radicalismo a nivel nacional y qué papel debe tener dentro de Unen?

Comparado con 2009, el radicalismo por sí solo fue un poco menos competitivo este año pues perdió 4-5 puntos. Sin embargo, es el único partido no peronista que ofrece una posibilidad de nacionalización en 2015. Creo que la UCR debe aumentar su vinculación societal y ser más capaz de aglutinar a toda la oferta no peronista para ser más competitivo en algunos distritos. En los distritos en los que lo hizo y fue menos endogámico, le fue mejor y tiene muchos activos, como su arraigo en la cultura política, como para ser competitivo. En 2015, la presencia de la UCR será necesaria pero no suficiente para estructurar una oferta no peronista competitiva.

Volviendo a la CABA, ¿cuál será la estrategia para disputarle al PRO la jefatura de Gobiernoen dos años?

Queremos gobernar la CABA y creemos que hay una coyuntura favorable como para hacerlo. El PRO no es tan fuerte como se cree y la sucesión en el macrismo no será fácil.

¿Lousteau 2015?

Es un candidato con mucho potencial y que representa muy bien un clima de época de una nueva generación en la Ciudad. Es un candidato Condorcet, como decimos en la ciencia política.

¿Y eso que sería?

Es un candidato que surge muy pocas veces pues tiene la peculiaridad de ser elegido por todos los sectores, algo que vimos muy claramente en las primarias con el corte de boleta a su favor. Es un candidato que está en una mediana y es aprobado por todos los sectores.

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